Las «medidas basadas en el mercado» suponen una forma importante y eficaz de reducir las emisiones de la aviación. Estas medidas se han diseñado para complementar las soluciones tecnológicas, como los nuevos diseños de aeronaves, las operaciones más eficientes y el uso de combustibles de aviación sostenibles.
En el presente artículo nos centramos en dos medidas basadas en el mercado que engloban actividades de aviación, a saber, el Régimen de Comercio de Derechos de Emisión (RCDE) de la UE y el Plan de Compensación y Reducción del Carbono para la Aviación Internacional (CORSIA) de la OACI.
Medidas basadas en el mercado
Las medidas basadas en el mercado son instrumentos diseñados para abordar el impacto climático que tiene la aviación y, por lo tanto, ayudar a reducir las emisiones. Estas herramientas adicionales van más allá de lo que se puede conseguir con las medidas operativas o tecnológicas o los combustibles de aviación sostenibles y resultan fundamentales para alcanzar los ambiciosos objetivos establecidos para el sector de la aviación. El principio subyacente de una medida basada en el mercado es internalizar el coste externo de las emisiones de carbono, incentivando así al sector de la aviación a invertir para reducir su huella de carbono. Dicho de otra forma, el sector tiene un especial interés en reducir las emisiones, ya que acaba pagando por ellas.
Regímenes de comercio de derechos de emisión y compensación
Los regímenes de comercio de derechos de emisión (por ejemplo, el RCDE UE) y los planes de compensación (por ejemplo, el CORSIA) abordan ambos las emisiones de la aviación, pero difieren en su funcionamiento. El objetivo de los regímenes de comercio de derechos de emisión es reducir las emisiones en toda la economía (los llamados «límites máximos»), mientras que los planes de compensación contrarrestan las emisiones con reducciones en otros sectores, pero sin un límite máximo asociado.
Régimen de Comercio de Derechos de Emisión de la UE (RCDE): programa de fijación de límites máximos
El RCDE UE es un sistema de fijación de límites máximos que establece un número limitado de derechos de emisión para los operadores aéreos, lo que restringe la cantidad total de emisiones del sector. Este régimen es la piedra angular de la política de la Unión Europea para combatir el cambio climático.
El número total de derechos de emisión es limitado y disminuye con el tiempo a través de un factor de reducción lineal, lo que garantiza que al nivel del sistema se cumple el objetivo de una reducción absoluta del nivel de emisiones de CO2.
Ejemplo:
El operador aéreo A no ha utilizado todos los derechos de emisión que se le han asignado y, por lo tanto, puede venderlos al operador aéreo B.
El operador aéreo B utilizó más emisiones de las que tenía a su disposición y, por lo tanto, necesita comprar derechos adicionales al operador aéreo A.
Los operadores aéreos pueden vender su excedente de derechos de emisión a otro operador aéreo que haya generado o se encuentre con emisiones que excedan su propia asignación.
Esto significa que, en general, la cantidad de emisiones:
- está limitada a un determinado nivel
- disminuye gradualmente, lo que permite al sector de la aviación cumplir sus objetivos de emisiones.
La oferta y la demanda de los derechos de emisión establecen su precio en virtud del RCDE UE, y cuanto más alto sea el precio, mayor será el incentivo para reducir las emisiones. Parte de los ingresos generados por la subasta de los derechos de emisión se destina al Fondo de Innovación, que ayudará en la demostración comercial de tecnologías innovadoras con bajas emisiones de carbono, con el objetivo de comercializar soluciones industriales para descarbonizar Europa y apoyar su transición hacia la neutralidad climática.
Objetivo: Se espera que en 2030 el RCDE UE haya ayudado a reducir las emisiones un 43 % en toda la economía, en comparación con los niveles de 2005 para los sectores que abarca este régimen.
El CORSIA de la OACI: sistema de compensación
Objetivo: El objetivo del CORSIA es alcanzar un crecimiento neutro en carbono a partir de 2020, es decir, garantizar que las emisiones netas de CO2 de la aviación internacional no superen los niveles de 2020. Los operadores aéreos deberán comprar créditos de compensación para compensar las emisiones de CO2 que superen la base de referencia correspondiente a 2019-2020.
Esto significa que:
- las emisiones netas de CO2 están limitadas a los niveles de 2020 y las emisiones netas de CO2 que superen los niveles de 2020 se compensarán a través de CORSIA
- se reducirán las emisiones en todos los sectores, lo que permite un enfoque holístico en la reducción de las emisiones.
Para obtener más información, visite el sitio web de la OACI.
Notificación de emisiones sólida y fiable: al servicio de la reducción de emisiones
Tanto el RCDE UE como el CORSIA incluyen sistemas de seguimiento, notificación y verificación similares, cuyo objetivo es garantizar que la información sobre las emisiones de CO2 recopilada a través del régimen sea sólida y fiable. A continuación, explicamos brevemente en qué consiste el sistema de seguimiento, notificación y verificación:
El RCDE UE y el CORSIA han evolucionado en los últimos años y seguirán haciéndolo en el futuro. Ambos abordarán la reducción de emisiones, además de lo que podrá conseguirse con la tecnología, las medidas operativas y los combustibles de aviación sostenibles. En la próxima edición del Informe Medioambiental de la Aviación Europea, cuya publicación está prevista para 2022, se ampliarán la información y los datos.
Impacto para los pasajeros
Las medidas basadas en el mercado, como el RCDE UE y el CORSIA, y los costes asociados de las emisiones de carbono deben considerarse una herramienta para incentivar las inversiones del sector de la aviación dirigidas a reducir su huella de carbono.
Históricamente, los costes del carbono han representado aproximadamente entre el 0,2 % y el 1,3 % de los costes operativos totales de las compañías aéreas, lo que equivale a una pequeña parte de los costes totales en comparación con, por ejemplo, el combustible de aviación.
Aunque es posible que las compañías aéreas trasladen total o parcialmente el coste de la compra de derechos de emisión ETS o los créditos compensatorios del CORSIA a los pasajeros, el impacto en los precios de los billetes depende de varios factores, incluidos la distancia del vuelo y el nivel de competencia en una ruta determinada.
Contribución de la EASA
La EASA está estrechamente involucrada en la articulación de las medidas basadas en el mercado. Su labor incluye:
Ofrecer apoyo técnico a la Comisión Europea sobre las medidas basadas en el mercado, incluida la acción normativa en el marco del CORSIA a través de los foros pertinentes de la OACI, y apoyo en la aplicación del RCDE UE.
Ofrecer apoyo a los socios internacionales en la aplicación del CORSIA a través de los proyectos de cooperación internacional de la EASA, por ejemplo, en las regiones del Sudeste Asiático, las Islas del Pacífico, África, el Caribe y América Latina.
- Eche un vistazo a uno de los proyectos de cooperación técnica de la EASA «Creación de capacidades para mitigar el CO2 de la aviación internacional en África y el Caribe (CORSIA África y el Caribe)».
Llevar a cabo actividades de investigación sobre medidas basadas en el mercado, que abarcan proyectos en el marco del programa de investigación Horizonte 2020, así como en el programa Horizonte UE, que se han ampliado a gran velocidad en los últimos años.
- Eche un vistazo a uno de los proyectos de investigación de la EASA «Investigación medioambiental — Medidas basadas en el mercado».